Los rompecabezas son uno de los pasatiempos favoritos de jóvenes y mayores. Son una forma fantástica de pasar unas horas de relax solo o con un ser querido, lejos de las distracciones de la vida cotidiana. Sin embargo, para las personas con demencia, los rompecabezas tienen numerosos beneficios.
Relajación
Hacer un rompecabezas estimula ambos lados del cerebro, creando un efecto meditativo y terapéutico en la persona, a menudo denominado estado Alfa. Este estado mental anima a la persona a relajarse, desconectar y sentirse tranquila. Para una persona con demencia, esto puede ser muy útil, especialmente si experimenta ansiedad o se siente intranquila.
Ejercicio cerebral
Al igual que el ejercicio suave es bueno para el cuerpo, los juegos cognitivos como los rompecabezas son buenos para el cerebro, ya que ayudan a mantenerlo sano e incluso pueden ayudar a ralentizar el deterioro del cerebro a medida que avanza la demencia. Realizar algunas horas de este tipo de ejercicios de desafío mental a la semana puede tener un beneficio increíble para las personas con demencia, estimulando y ejercitando ambos lados del cerebro. El lado derecho, que es el responsable de la creatividad y el pensamiento intuitivo, y el lado izquierdo, que es el encargado de la lógica y el orden.
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Percepción visual
Los rompecabezas requieren que busques constantemente la pieza de la forma o el color correcto. Esto no solo mejora la percepción visual, sino que también ayuda a reforzar la memoria a corto plazo.
Socialización
Aunque los rompecabezas pueden disfrutarse solos, también son una forma estupenda de fomentar la interacción y la socialización, algo que a menudo puede resultar difícil para las personas con demencia. Las personas pueden completar el rompecabezas juntas, ayudándose mutuamente a encontrar las piezas correctas, colocarlas en los espacios adecuados y ver cómo va formándose la imagen. La conversación puede surgir de forma natural mientras disfrutan del rompecabezas o las imágenes de los rompecabezas pueden ayudar a desencadenar recuerdos y provocar el diálogo.
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Efecto de bienestar
Por último, contribuyen al bienestar. Las investigaciones han demostrado que cuando estamos concentrados en hacer un rompecabezas, el nivel de dopamina. Esta sustancia química que nos hace sentir bien aumenta en nuestro cerebro, ayudando a las personas a sentirse felices. Por último, completar un rompecabezas también da una fuerte sensación de logro, éxito y orgullo. Pero, ¿qué tipo de rompecabezas debe elegir para usted o para su ser querido?
Hay diferentes tipos de rompecabezas para la demencia que han sido creados para diferentes etapas de la demencia. En general, el tipo de puzzle que elijas estará directamente relacionado con el número de piezas que tenga. A las personas en las primeras fases de la demencia les puede resultar fácil completar un puzzle de 100 o más piezas. Sin embargo, a medida que la demencia avanza, completar los rompecabezas estándar puede resultar más difícil. Esto se debe al deterioro cognitivo, pero también a la capacidad de manipular las piezas.
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Nuestro socio Relish, experto en el campo de los juegos y actividades para personas con demencia, ofrece varios rompecabezas en su catálogo. Hay rompecabezas de 63, 35 y 13 piezas. A medida que el número de piezas disminuye, el tamaño de las mismas aumenta. Esto hace que sean más fáciles de manejar para las personas con problemas de destreza, y el rompecabezas se vuelve más sencillo. Las imágenes de los rompecabezas también se han elegido cuidadosamente para ayudar a evocar recuerdos y, potencialmente, desencadenar un debate en torno a esos recuerdos específicos.
Puzles ergonómicos – jardín 63 piezas: Puzles con un diseño visual que se ajustan a la sensibilidad de jóvenes adultos y personas mayores. Detalles ergonómicos cuidadosamente estudiados: piezas gruesas, ligeras y fáciles de sujetar, un acabado mate para un mayor confort visual sin reflejos y una guía con contrastes para facilitar la colocación (modelo de 13 piezas). Dimensiones del puzle acabado: 35 x 24 cm. De plástico mate. Incluye una caja de almacenamiento ultrafina que ahorra espacio.
Puzles ergonómicos – río- 35 piezas: Puzles con un diseño visual que se ajustan a la sensibilidad de jóvenes adultos y personas mayores. Detalles ergonómicos cuidadosamente estudiados: piezas gruesas, ligeras y fáciles de sujetar, un acabado mate para un mayor confort visual sin reflejos y una guía con contrastes para facilitar la colocación. Dimensiones del puzle acabado: 35 x 24 cm
Puzle ergonómico – cachorro – 13 piezas: Un puzle con un visual de cachorro que apela a la sensibilidad de los adultos jóvenes y mayores. Detalles ergonómicos que dan en el clavo: piezas gruesas y ligeras que resultan fáciles de sujetar, un acabado mate para aumentar el confort visual, ausencia de reflejos molestos y una guía de contraste que ayuda a la colocación.
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