Nadie es indiferente a los cambios en su vida. Tanto si eres un niño como un adulto, lo desconocido suele ser una fuente de miedo y estrés. Los niños están muy tranquilos con sus rutinas, que son sus puntos de referencia. Les dan un marco y estabilidad. Los niños con discapacidad son más receptivos a los cambios visuales y/o auditivos. El cambio puede ser un verdadero trastorno. Para aceptarlo y gestionarlo mejor, te proponemos 10 ideas para que tus hijos entiendan que forma parte de la vida.
1. Comunicar
Es importante que comuniques con tu hijo. Hay que hablar con ellos, explicarles las cosas y responder a sus preguntas y consultas. Al establecer un diálogo con tu hijo, puedes prepararlo para el cambio. Escuchándoles y dándoles mensajes de adaptabilidad, podrán entender el cambio. No dudes en mostrar y explicar todos los cambios que ya ha hecho en su vida. Por ejemplo, mostrándole fotos de cuando era niño, su antigua casa, su antiguo colegio con sus compañeros de entonces, etc.
Libro de comunicación cinturón Este libro de comunicación se puede llevar alrededor de la cintura gracias a sus lazos en los que se puede deslizar un cinturón. Le permite tener siempre pictogramas para mostrar o dar para iniciar una comunicación. 8 páginas, tamaño 23 x 10 cm. Un bolsillo con cremallera le permite almacenar imágenes que no necesita
2. Identificar la ansiedad para gestionarla mejor
El cambio puede crear muchas inseguridades, preocupaciones y pensamientos negativos. Identifica claramente el origen del estrés para poder controlarlo mejor. Escribir es una buena manera de «controlar los trastornos de ansiedad». Haz que escriban un diario con sus preocupaciones y que piensen en soluciones. También puedes pedir consejo a otras personas que estén en la misma situación que tú o tu hijo.
3. Tomar el tiempo necesario para el cambio
Para gestionar esta transición, es importante tomárselo con calma y no precipitarse. Hay que contar con que cualquier cambio llevará tiempo. La aceptación es un proceso largo para diferentes personas. Intenta hacerle entender para que no siga insistiendo en el pasado. Cada uno se mueve a su ritmo, y la nostalgia se desvanece con el tiempo.
4. Tomar el cambio como una oportunidad
Es una oportunidad para reevaluar la propia vida. En particular, para ver si has tomado decisiones positivas, o si has dedicado demasiado tiempo o esfuerzo a una vida que no te llena. Aunque puede ser doloroso, el cambio suele tener un lado positivo, ya que demuestra que puedes abrirte a nuevas aventuras y experiencias. El cambio puede ayudarnos a superar esto.
Lote figuras el color de las emociones: Estas figuras están inspiradas en el libro «El color de las emociones». Una mañana, el monstruo de colores se despierta hecho un lío: sus emociones están mezcladas y no es capaz de reconocerlas. Una niña, Nuna, viene a ayudarle a «ordenarlas» para que pueda identificarlas y sentirse mejor. Ayuda al niño a reconocer sus emociones, a nombrarlas y a hablar de ellas
5. No ser negativo
El niño debe aceptar y comprender esta fase de transición y el carácter inevitabel de los cambios en la vida. «Acepto el cambio y soy yo el que decide lq mqnerq de gestionarlo». De este modo, el aspecto negativo es más pequeño. » Yo controlo las cosas».
6. Centrarse en sí mismo
Tu hijo debe tomarse tiempo para sí mismo. La relajación ayuda a reducir el estrés y mejorar la salud emocional. Ciertas técnicas como la meditación, la respiración profunda y la relajación muscular también pueden ayudar con la relajación y el manejo del estrés. Hacer una actividad deportiva regular también ayuda a gestionar las emociones. Los niños necesitan aire fresco, sol, hierba, los sonidos de la naturaleza, espacios abiertos, árboles para trepar, tierra para explorar… Salir a la calle, no estar encerrados, tomar aire fresco es fundamental para afrontar con éxito un cambio difícil
Kit de laberinto Mindfulness: Esta herramienta ayuda a los niños a practicar la gestión de sus emociones y a cultivar la atención plena a través de 6 ejercicios de respiración guiada. El juego viene con 3 tableros de doble cara, cada uno con un atractivo diseño: un trébol, un león, un camino de laberinto, un arco iris, una estrella y olas. Los niños siguen el diseño con los dedos, inspirando y expirando. 2 niveles: principiante y avanzado. Incluye una guía.
7. Estimula al niño con actividades
Las actividades manuales son la clave para encontrar la concentración. La estimulación también significa tener momentos de descanso intelectual. Ofrezca a su hijo actividades manuales como: colorear, dibujar, juegos de construcción, modelar/masa de sal o cocinar. Será actor de su propia acción y actividad.
<< Actividad: Grafismo en la arena
8. No fuerces las cosas
Es importante que permitas a tu hijo elegir sus actividades y su aprendizaje. Cuando el niño es pequeño, es sencillo: va por sí mismo a lo que le atrae y sabe decir no (refunfuñar, apartar o irse) cuando algo no le gusta. Es diferente cuando el niño crece y va a la escuela. Porque en la escuela hay tiempos de aprendizaje y actividades que se imponen: se establece, pues, un marco.
9. Haz que salga de sus habitudes
Si quieres salir de la rutina, tienes que desarrollar nuevas habilidades y descubrir nuevas áreas. Si te desafías a ti mismo y no tienes miedo al fracaso, puedes conseguirlo. Salir de tus referencias habituales no significa que tu hijo tenga que lanzarse en paracaídas o hacer cosas increíbles mañana, con el riesgo de ponerse en peligro, sino cambiar sus hábitos.
10. Mirar hacia le futuro
Para aceptar el cambio, es importante mirar al futuro. Tener objetivos te ayudará. Por ejemplo: hacerse voluntario en la asociación cercana a su casa, practicar un deporte o una actividad creativa, leer más, aprender un instrumento musical…
<< Descarga el Muro del Tiempo Montessori
¿Has tenido algún cambio importante en tu vida y la de tu familia? ¿Cómo ayudaste a tu hijo/a a aceptarlo? ¿Qué consejo te gustaría compartir con la comunidad de Hop’Toys? Cuéntanos en los comentarios.
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