La prosopagnosia es un trastorno del reconocimiento de los rostros. El termino proviene de los términos griegos: «Prosopon», rostro y «Agnosia»,  la ignorancia».

Las personas afectadas por este trastorno no reconocen a los rostros de los demás: pueden ver claramente sus caras, pero no consiguen ligarlas a personas.

Como no pueden reconocer o memorizar un rostro, desarrollan sistemas retorcidos para reconocerlos como la voz, los accesorios, los cabellos, etc.

Existen dos formas de prosopagnosia: la primera se manifiesta tras una lesión cerebral (accidente vascular cerebral, traumatismo craneal,etc) y la segunda, congénita, se desarrolla desde la infancia.